En la madrugada de hoy dejó de existir a los 79 años, y luego de una larga enfermedad, monseñor Miguel Héctor Soria. Era un sacerdote muy apreciado por los fieles católicos del sur tucumano, en donde en varias jurisdicciones desempeñó su tarea pastoral.
Sus restos, en medio de muestras de aprecio y dolor, son velados en la Iglesia Catedral de Concepción y serán inhumados mañana después una misa exequial que estará a cargo del obispo José Díaz.
Soria nació el 23 de marzo de 1943 en Yucumanita (Medinas) y fue ordenado sacerdote el 21 de agosto de 1966. Durante sus 55 años de sacerdote fue párroco en varias comunidades.
Fue el primero en la parroquia San Isidro Labrador de Los Sarmiento a partir de 1979. También estuvo en la Parroquia Catedral, en la de San José de Alberdi y en la Inmaculada Concepción de Graneros. Fue vicario diocesano durante el pastoreo del obispo emérito monseñor José María Rossi.
El padre Soria era muy entusiasta del folklore nacional y en las reuniones, según recuerdan sus amigos, siempre solía tomar una guitarra para exhibir sus dotes de intérprete. Incluso compuso una zamba dedicada a la Inmaculada Concepción.
La muerte de monseñor Soria fue dada a conocer esta mañana mediante un comunicado del obispado de la Santísima Concepción.